Por Marcela Leopo Flores

El Ayuntamiento de Guadalajara cumplió con la Recomendación 4/2009 e indemnizó por 150 mil pesos a la viuda un hombre que murió tras ser agredido por policías municipales luego de que lo detuvieron porque supuestamente estaba en estado de ebriedad y agresivo.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ) acreditó que Enrique García Robles y Pablo Ríos González, elementos de la Dirección General de Seguridad Pública de Guadalajara, violaron el derecho a la vida de una persona a quien privaron de su libertad y golpearon, por lo que dirigió la Recomendación 4/09 al presidente municipal, a quien le solicitó, entre otras cosas, reparar los daños a los deudos.

El 20 de enero de 2009 los policías fueron detenidos acusados de “levantar” y golpear a un mesero, cuyo cadáver fue localizado el 20 de enero a la entrada de la barranca de Oblatos, a 200 metros de la parte posterior del edificio de la policía. De acuerdo con la autopsia, la causa del fallecimiento fue una contusión difusa de cráneo y golpes en el abdomen.

Por estos hechos la Comisión inició de oficio una investigación; posteriormente, familiares del agraviado interpusieron una queja que concluyó con la mencionada resolución. Ambos oficiales reconocieron haber realizado la detención el 19 de enero en la noche porque supuestamente el sujeto estaba ebrio, agresivo y estorbaba el tránsito de los vehículos; lo esposaron y lo subieron a la patrulla: lo trasladaron a la colonia Jardines de la Barranca, donde lo llevaron a la orilla de la barranca de Oblatos y lo empujaron al vacío.